Redacción | V+ Noticias

Ciudad de México. El Consejo General del Instituto Nacional Electoral (INE) evaluará este jueves el impacto del rebase en el tope de gastos de campaña de Javier Joaquín López Casarín, presidente municipal electo de Álvaro Obregón, quien fue postulado en alianza por Morena, el PT y el Partido Verde Ecologista.

De acuerdo con la normativa vigente, en un proceso electoral cerrado, como ocurrió en esta alcaldía, si el rebase de gastos supera el cinco por ciento, que en este caso fue del 6.7 por ciento, los comicios podrían anularse; no obstante, esta decisión deberá ser confirmada por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF).

El proyecto del INE, que consta de casi 500 páginas, señala que López Casarín reportó gastos por 2.5 millones de pesos, pero se detectaron «beneficios» adicionales por un millón de pesos, lo que llevó el total a 3.5 millones, superando el límite establecido por 222 mil 397 pesos.

Además, se contempla la imposición de multas equivalentes al cien por ciento del monto no reportado, debido a omisiones en la declaración de gastos en publicidad en redes sociales, así como la falta de rechazo de aportaciones de entidades prohibidas y personas no identificadas.

En el documento del INE se indica: “El rebase a los topes de gastos de campaña representa una conducta reprochable por parte de cualquiera de los sujetos obligados, puesto que ello pudiera estimarse atentatorio de la libertad del sufragio, por ejercerse indebidamente una ventaja respecto de los demás contendientes”.

Este tema forma parte de un paquete de 38 informes en materia de fiscalización que se discutirá casi al final de una sesión con 29 puntos a tratar.

La Unidad Técnica de Fiscalización del INE identificó que 149 rutas electrónicas no fueron debidamente reportadas. Además, detectaron 239 anuncios en Facebook por un valor total de 309 mil 777.39 pesos, así como la edición y producción de 70 publicaciones y 81 videos difundidos en esa plataforma, los cuales suman 175 mil 885.90 pesos.

Una de las personas que denunció estas irregularidades es Lía Limón, quien buscó la reelección en esa alcaldía bajo la coalición del PRI, PAN y PRD; sin embargo, tanto López Casarín como Limón han decidido no hacer declaraciones al respecto. El equipo de comunicación de la opositora señaló que la candidata no emitirá comentarios.

En una postura similar, Sebastián Ramírez, presidente de Morena en la Ciudad de México, también ha optado por no expresar su opinión sobre el caso. Tanto Ramírez como los otros involucrados han manifestado que darán su postura pública solo después de que el INE emita su resolución.